El gobierno de ocupación sigue intensificando sus abusos en varias áreas. Esto muestra la importancia de la declaración de los diplomáticos de EE.UU. a sus homólogos internacionales sobre el incumplimiento de las resoluciones 242 y 338 de la ONU y otras resoluciones internacionales.
Frente a ello, el Gobierno israelí está estudiando las reacciones a sus prácticas y declaraciones relativas a la aplicación de la anexión oficial, y está tratando de contener esas reacciones y adaptar sus medidas en consecuencia.
En el lado palestino, lo más peligroso que podría ocurrir sería adoptar una posición de espera pasiva, o sobrestimar y exagerar las consecuencias de una posible caída de Trump y una elección de Biden.