Las políticas de exterior de Donald Trump y la posible candidata del partido Democrático Hillary Clinton, a pesar de sus diferencias, prometen un futuro de interminables militarismos, ataques de drones, apoyo a los dictadores, y despiadadas políticas económicas neoliberales en todo el mundo. Lejos de rechazar el fundamentalismo político y el terrorismo en el mundo musulmán, sus políticas – la marca de terrorismo propia de América – están creadas para reforzar estas fuerzas reaccionarias. El gobierno australiano que llevó a cabo una política internacional diferente basada en los principios de la democracia y de la justicia social y económica podría, en efecto, ocurrir a través de una “revolución política” – pero, lamentablemente, las políticas exteriores de Bernie Sanders quedan muy lejos de este objetivo. Sin embargo, al mismo tiempo, las aspiraciones de los millones de personas que han confiado en Sanders señalan unas políticas exteriores tan revolucionarías. Estas personas necesitan ir más allá de Sanders y declaran su total independencia política del Partido Democrático, el cual ha demostrado ser un pilar de dicha situación.
Joanne Landy